Àngel rodríguez Vilagran
periodista. Girona
LA POSVERDAD
El diccionario Oxford escogió “posverdad” como la palabra del año 2016. La definió como “La situación en la cual a la hora de crear opinión pública, los hechos objetivos tienen menos influencia que las emociones y las creencias personales”. ¿Queda bien esta definición, verdad? No os preocupéis, llanamente quiere decir que “lo que pasa es menos importante que lo que sentimos realmente” por lo tanto podemos inducir claramente a una falsa verdad de lo que ocurre dependiendo de nuestra opinión y sentimientos.
El auge de Twitter tiene efectos positivos y negativos. Yo mismo me declaro un amante de Twitter, pero cada vez más elimino de las cuentas que sigo aquellas que no me proporcionan autenticidad. Twitter permite seguir a tus periodistas, líderes de opinión, políticos, deportistas, medios de comunicación… que más te gustan y gracias a ellos intentas seguir la actualidad. El problema viene de aquellas cuentas interesadas que buscan crear opinión sobre hechos y que deforman subjetivamente la realidad. Cuentas que te explican noticias totalmente falsas y manipuladas a favor de opciones políticas haciéndotelas pasar como ciertas. El término “Posverdad” (después de la verdad) sería mucho más válido como “posmentira (después de la mentira). Cada vez más como buenos usuarios de Twitter tenemos que ir con cuidado de no caer en las tentaciones de partidos políticos que crean sus propias cuentas falsas para que piquemos en sus “posverdades”. Hoy más que nunca nos será válida la frase periodística de que “las opiniones son libres, pero los hechos son los que son”.
Àngel Rodríguez Vilagran
(Artículo publicado en El Mensajero de San Antonio, en enero de 2018)
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