Àngel rodríguez Vilagran
periodista. Girona
¡VIVA LA FIESTA DEL LIBRO (de papel)!
Somos muchos, no sólo los libreros, los que agradecen, yo ya no se si a la Divina Misericordia , que el libro de papel no haya desaparecido. De hecho, la humanidad, por si sola, es más inteligente que algunos gurús que quieren controlarla. Y si no, pregúntenles a todos estos vendedores de humo que vaticinaron hace una década el fin del libro de papel y su sustitución por el electrónico. Pregúntenle al señor Ruiz Zafón si está o no contento de la venta de su último libro “El laberinto de los espíritus”. Que piensan ahora estos “sabios” cuando en el último congreso de móviles de Barcelona se ha presentado un rejuvenecido modelo del típico móvil 3310 aparecido hace diez años. Un aparato sin el sistema Android que no facilita aplicaciones como el WhatsApp ni tampoco conexión Wifii. Vaya, un teléfono como los de antes: llamar, recibir llamadas y enviar mensajes de texto!
¡Bienvenida sea la fiesta del libro el próximo 23 de abril! Una fiesta que empezó a celebrarse en España el 7 de octubre de 1926, teóricamente porque este día se creía que era cuando había nacido el escritor Miguel de Cervantes (1547-1616). Su impulsor fue el escritor y editor valenciano, Vicente Clavel Andrés, establecido en Barcelona, gran aficionado a Cervantes, - no en vano su editorial se llamaba “Cervantes”- y vicepresidente de la Cámara oficial del Libro de Barcelona.
En 1930 se cambió la fecha por la del 23 de abril, época de mejor meteorología para organizar actos en la calle y porque se pensaba que era la fecha que había muerto Cervantes (en realidad, falleció el día 22, pero en su lápida figuraba el 23). En 1995 la UNESCO constituyó el 23 de abril como el Día mundial del Libro y de los derechos de Autor.
Uno de los sitios donde se vive intensamente esta fiesta es en Cataluña, donde la enamorada regala el libro a su enamorado y este le corresponde con una rosa. El hecho de regalar en el día de San Jorge una rosa a la persona amada es una tradición ya documentada en el siglo XV.
Ángel Rodríguez Vilagran
(Artículo publicado en El Mensajero de San Antonio, en abril de 2017)
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